Estuve presente en la realización de varias técnicas de tratamiento fisioterapéutico, como las movilizaciones artrocinemáticas, técnicas neuromusculares, aplicación de corrientes interferenciales, US, láser, CHC, fluidoterapia y por supuesto el ejercicio fisioterapéutico que es el motor de la rehabilitación, entendí significativamente el efecto fisiológico de las corrientes galvánicas que se debe principalmente a efectos electroquímicos dados por la disociación electrolítica y la acumulación de iones bajo cada electrodo colocado sobre la piel. Estudié más sobre la tracción mecánica, las distintas formas de aplicación como la manual que el propio fisio la realiza y es buena por el contacto directo con el paciente y de esa manera poder ayudarlo, la tracción mecánica en sus modalidades continua e intermitente que son de gran ayuda en la distensión y relajación muscular y separación de superficies articulares, el principal mecanismo de acción es la estimulante en los mecanorreceptores (huso neuromuscular y OTG) y ayuda a la irrigación segmentaria lo que estimula el mecanismo de la ley de Wolf que se refiere a groso modo a las cargas y presiones en el cuerpo vertebral lo que aumenta el metabolismo y por lo tanto una acción mayor de proliferación en los osteoblastos para reforzar el tejido oseo.
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